Pros y contras de pedir una excedencia en 2024

Pros y contras de pedir una excedencia

Solicitar una excedencia laboral es una decisión importante que puede tener un gran impacto en tu vida personal y profesional. En este artículo, exploramos los pros y contras de pedir una excedencia, así como los motivos y las consecuencias de tomar esta decisión. Además, compararemos esta opción con la renuncia definitiva al trabajo. ¡Sigue leyendo para descubrir todos los detalles y tomar una decisión informada!

Índice de contenidos
  1. ¿Qué es una excedencia laboral?
  2. ¿Merece la pena pedir excedencia?
    1. Pros de pedir una excedencia
    2. Contras de pedir una excedencia
  3. ¿Cuáles son las consecuencias de pedir una excedencia?
  4. Motivos para pedir una excedencia
  5. ¿Qué es mejor renunciar o pedir una excedencia?
  6. Preguntas frecuentes
    1. ¿Puedo trabajar en otra empresa durante la excedencia?
    2. ¿Qué pasa si la empresa no tiene vacantes al final de mi excedencia?
    3. ¿Cómo afecta la excedencia a mi antigüedad y beneficios?
  7. Conclusión

¿Qué es una excedencia laboral?

Una excedencia laboral es un derecho reconocido en el Estatuto de los Trabajadores que permite a los empleados suspender temporalmente su relación contractual con la empresa sin perder el vínculo laboral. Durante este periodo, el trabajador no está obligado a prestar sus servicios ni el empleador a pagar el salario, pero el contrato no se rescinde, lo que otorga cierta seguridad de reintegro al término de la excedencia.

¿Merece la pena pedir excedencia?

Para evaluar si merece la pena pedir una excedencia, es fundamental considerar tanto los beneficios como los inconvenientes de esta decisión.

Pros de pedir una excedencia

Solicitar una excedencia laboral ofrece múltiples beneficios que pueden mejorar tanto tu vida personal como profesional:

  • Realización de otras actividades. Pedir una excedencia permite dedicar tiempo a actividades personales que no podrías realizar mientras trabajas, como emprender proyectos personales, prepararte unas oposiciones, viajar, estudiar o simplemente descansar. Este periodo ofrece la libertad de explorar nuevas oportunidades y desarrollar habilidades que pueden ser beneficiosas a largo plazo.
  • Dedicación a la familia. Una excedencia ofrece la oportunidad de pasar más tiempo con la familia, cuidar a un familiar enfermo o disfrutar de momentos importantes en la vida de los hijos. Este tiempo puede ser crucial para fortalecer las relaciones familiares y atender necesidades personales.
  • Mantenimiento de derechos laborales. Durante la excedencia, no pierdes los derechos adquiridos en tu puesto de trabajo. La antigüedad y otros beneficios se mantienen, y tienes preferencia para regresar a un puesto similar al que ocupabas antes de tomar la excedencia, siempre que haya vacantes disponibles.
  • Posibilidad de prorrogar la excedencia. En muchos casos, la excedencia puede ser prorrogada si la empresa lo acepta, ofreciendo flexibilidad adicional. Esta opción es útil si necesitas más tiempo para completar tus objetivos o si las circunstancias personales se prolongan más de lo esperado.
  • Reducción del estrés y mayor motivación. Tomarse un tiempo libre del trabajo puede ser extremadamente beneficioso para la salud mental y el bienestar general. La reducción del estrés laboral y la oportunidad de descansar pueden ayudarte a regresar al trabajo con energías renovadas y una motivación aumentada.
  • Posibilidad de cobrar el paro. Si al finalizar la excedencia no puedes reincorporarte a tu puesto, podrías tener derecho a cobrar el paro, lo que te proporciona una seguridad económica adicional.

Contras de pedir una excedencia

Aunque pedir una excedencia puede ofrecer numerosos beneficios, también conlleva ciertos inconvenientes que es importante considerar:

  • Impacto financiero. Durante el periodo de excedencia, no recibirás tu sueldo, lo que puede representar un desafío económico si no te preparas adecuadamente​. Además, no podrás cobrar el paro, ya que no se considera una situación de desempleo.
  • Suspensión de las cotizaciones a la Seguridad Social. Durante la excedencia, no se acumulan cotizaciones a la Seguridad Social, lo cual puede afectar a tus beneficios futuros y tu antigüedad en la empresa. Es importante tener en cuenta este factor al evaluar el impacto a largo plazo.
  • Incertidumbre laboral. No hay garantías de que puedas reincorporarte a la misma posición al finalizar la excedencia, ya que dependerá de las necesidades y vacantes de la empresa en ese momento. Esto puede generar incertidumbre sobre tu futuro laboral.
  • Prórroga de la excedencia. La empresa puede denegar la prórroga de tu excedencia, limitando tu capacidad de planificación a largo plazo. Además, si decides solicitar el regreso antes del final del periodo de excedencia, la empresa no está obligada a aceptarlo, lo que puede complicar tu situación laboral.
  • Riesgo de rescisión de contrato. Aunque la empresa acepte la excedencia, existe el riesgo de que rescinda tu contrato al finalizar la misma. Esto puede ocurrir si la empresa considera que ya no necesita tu puesto o si surgen cambios en la estructura organizativa durante tu ausencia.​

¿Cuáles son las consecuencias de pedir una excedencia?

Pedir una excedencia puede tener varias consecuencias tanto a nivel personal como profesional. Desde el punto de vista laboral, no acumularás antigüedad ni cotizaciones durante este tiempo, lo que puede influir en tus beneficios futuros. Además, aunque tengas preferencia para regresar a tu puesto, esto no siempre está garantizado, y podrías enfrentarte a la posibilidad de no encontrar vacantes disponibles al finalizar tu excedencia.

Motivos para pedir una excedencia

Pedir una excedencia puede ser necesario por diversas razones, dependiendo de las circunstancias personales y profesionales del trabajador. A continuación, se detallan algunos de los motivos más comunes para solicitar una excedencia:

  • Cuidado de hijos. La excedencia por cuidado de hijos permite a los padres ausentarse del trabajo para atender a sus hijos, ya sea por nacimiento, adopción o acogida. La duración máxima es de tres años y el trabajador tiene derecho a conservar su puesto durante el primer año.
  • Cuidado de familiares. Este tipo de excedencia está destinada a aquellos trabajadores que necesitan cuidar a familiares hasta el segundo grado de consanguinidad o afinidad debido a una enfermedad grave o incapacidad. La duración máxima es de dos años y el puesto de trabajo se reserva durante el primer año.
  • Desarrollo profesional y personal. Algunos empleados solicitan excedencias para dedicarse a su formación, como estudiar un máster o prepararse para oposiciones. Esta opción también es válida para aquellos que desean emprender un proyecto personal o explorar nuevas oportunidades laborales.
  • Emprendimiento. Para aquellos que desean iniciar su propio negocio, una excedencia proporciona el tiempo necesario para enfocarse en su nuevo emprendimiento sin la presión de sus responsabilidades laborales actuales.
  • Cambio de carrera. Algunos trabajadores optan por una excedencia para probar nuevas oportunidades profesionales en otros campos, permitiéndoles adquirir nuevas habilidades y experiencia sin romper completamente su vínculo con su empleador actual.
  • Descanso y recuperación. En ocasiones, una excedencia puede ser solicitada simplemente para descansar y recuperarse del estrés acumulado, lo que puede ser beneficioso para la salud mental y física del trabajador.
  • Trabajo en el sector público. Los empleados que consiguen un puesto de carácter público también pueden solicitar una excedencia forzosa, que les permite cumplir con sus nuevas responsabilidades sin perder su antigüedad y derechos en la empresa original.

Cada uno de estos motivos responde a diferentes necesidades y circunstancias. Es importante que los trabajadores evalúen su situación particular para decidir si solicitar una excedencia es la mejor opción para ellos.

¿Qué es mejor renunciar o pedir una excedencia?

Comparar la opción de renunciar a tu empleo con pedir una excedencia depende de varios factores relacionados con la seguridad laboral y los beneficios futuros. Pedir una excedencia te permite mantener una relación con la empresa y la posibilidad de regresar, mientras que la renuncia es definitiva. Además, al finalizar una excedencia, podrías tener derecho a prestaciones por desempleo si no puedes reincorporarte a tu puesto, algo que no ocurre con la renuncia.

Preguntas frecuentes

¿Puedo trabajar en otra empresa durante la excedencia?

Sí, puedes trabajar en otra empresa siempre y cuando no haya un conflicto de intereses con tu empleador actual. La excedencia te permite suspender temporalmente tu relación laboral con tu empresa actual, lo que te da la libertad de explorar otras oportunidades laborales. Sin embargo, es importante revisar las políticas específicas de tu empresa y cualquier cláusula contractual que pueda aplicarse.

¿Qué pasa si la empresa no tiene vacantes al final de mi excedencia?

Tendrás preferencia para ocupar una vacante similar cuando esté disponible, pero no se garantiza el mismo puesto de trabajo.

¿Cómo afecta la excedencia a mi antigüedad y beneficios?

El tiempo de excedencia no se cuenta para la antigüedad ni para las cotizaciones a la seguridad social, lo que puede afectar a tus beneficios futuros.

Conclusión

Pedir una excedencia es una decisión que debe tomarse con cuidado, evaluando tanto sus pros como sus contras. Puede ofrecerte la oportunidad de realizar actividades personales y profesionales que de otra forma no podrías, pero también implica desafíos económicos y la posibilidad de no poder regresar a tu puesto de trabajo. Considerar los pros y contras de pedir una excedencia te ayudará a tomar una decisión informada. Evalúa tus circunstancias personales, tus objetivos a largo plazo y planifica adecuadamente para tomar la mejor decisión para tu situación.

Jesús D. Saavedra

Redactor de contenidos web & Técnico de Marketing Digital.